LA MARGINALIDAD SE TERMINARIA SI LOS MARGINADOS ESTUVIERAN CERCA NUESTRO

Hace algún tiempo en la ciudad de La Paz se hecho a correr el rumor de que el Gobierno nacional esta efectuando contactos con autoridades Provinciales y Municipales para lograr la radicación en nuestra ciudad de habitantes de la denominada Villa 31 de la Capital Federal.-

Esto origino que algunas personas incluso organizaran reuniones o asambleas con el propósito (evidente aunque no explicito) de oponerse a esta hipotética medida.-

Sin que nadie pueda señalar quien fue el que dijo que semejante decisión poder ser tomada, ni poder tampoco referir la fuente de la información, tampoco quien había señalado esto como posible, se comenzó a generar la psicosis que daba por sentado que esto ocurriría.-

Como es lógico en estas circunstancias, tanto el jefe político local -el intendente-, como los legisladores del departamento, es decir el senador y la diputada, junto a Ministros del Gobierno Provincial y demás autoridades gubernamentales negaron esta posibilidad en forma expresa y a través de comunicados manifestaron la inexactitud de las versiones.-

Pero en forma absolutamente ilógica los que llevaban la idea de oponerse a esta radicación manifestaron no creer en los políticos e indicaron casos en los que las negaciones no se compadecían con la realidad, citando hechos similares en apariencia ocurridos en la ciudad de Concordia hace ya tiempo.-

Ante tal incredulidad enviaron reclamos a los medios nacionales y provinciales; los cuales interpretaron la oposición a la radicación, aún con la negativa de las autoridades, como miedo cargado de xenofobia a los marginados y pobres.-

Logramos transformarnos en una noticia que servía para desnudar un duro conflicto social en la argentina, la idea de que la delincuencia y la inseguridad es fruto de los sectores que viven en villas de emergencias y por ende nadie quiere compartir con ellos absolutamente nada.-

Esta situación fue transcripta en medios nacionales como el diario Clarín del Jueves 2 de Abril de 1009 en una nota en la sección sociedad firmada por Pablo Calvo con el titulo “Una ciudad de Entre Ríos no quiere recibir a los pobres de Buenos Aires” y en dicha nota se hace referencia al carácter discriminador de la gente que se oponían a esta situación –reitero- hipotética.- Dicha nota mereció, por parte de los asambleísta que se oponían a la radicación aludida, la categorización de “sacada de contexto” algo que ya es común en nuestro país donde las personas señalan o dan cuenta de sus posiciones y posteriormente cuando esta son interpretadas señalan que las palabras son sacadas de contexto.-

Me preocupa esta actitud de quienes denunciaron una situación negada por varias razones.-

En primer término me preocupa que siempre en la ciudad de La Paz se logro movilizar algún sector de nuestra población en forma rápida para oponerse, ya sea a la construcción de represas, a la perforación termal, a la utilización de un predio denominado “la curtiembre” para el emprendimiento termal, a la instalación y construcción de un instituto carcelario, etc. Pero nunca se logro movilizar a los mismos sectores para –en lugar de oponerse- acompañar algunos proyectos como la construcción de un puente que nos usa con Santa Fe, la concreción de actividades industriales, la reparación de caminos etc.- Pareciera que los sectores de dirigentes, profesionales, políticos, docentes, productores, comerciantes, clase media en general, llevan internalizado el deseo de oposición y estén desprovistos del deseo de construir en conjunto.-

En segundo término es también preocupante, desde mi visión, que la población manifieste no creerle a los políticos y gobernantes y le crea tanto a los mismos cuando son candidatos.- Es dable señalar que mas allá de las razones que nos lleven a pensar que los gobernantes esgrimen mentiras no es menos cierto que los sectores que se oponen a la radicación aludida son aquellos que deben estar convencidos del sustento al sistema institucional y ello nos hace concluir que cuando el intendente o los ministros del gobierno de la provincia hacen un anuncio como el que nos ocupa, negando un rumor, entre el rumor de alguien desconocido y la palabra o el comunicado escrito de los responsables de la medida no queda dudas de que quien crea en el sistema institucional debe aceptar las manifestaciones del ultimo y desestimar el rumor; lo cual no ocurre en este caso.-

En tercer lugar es sumamente preocupante que algún sector de nuestra sociedad piense que los villeros son delincuentes, no es cierto que los villeros sean delincuentes es cierto que hay villeros delincuentes como hay jueces, abogados, médicos, periodista y hasta curas que cometen delito pero estos sectores lejos están de excluir a ninguno de ellos, si a los villeros porque son marginales, el temor es que alguien que la sociedad margino se pueda juntar con nosotros compartir el territorio, lo cotidiano, vivan cerca nuestro, y todo esto lo piensan, a contramano de una sociedad profundamente cristiana ya que cristo siempre estuvo al lado de los marginales y los excluidos.-

En los sectores que se oponen a la hipótesis de radicar en esta ciudad villeros en el discurso les aflige que no se los saque de su marginalidad y no se los aliente a mejorar su condición de vida pero no los quieren cerca los quieren en sus villas lo cual impide que se cumpla su discurso; eso en realidad es ser mentiroso y cínico y si no es así son por lo menos inconcientes ante una realidad de la que huyen.-

Eduardo Martín Romero
18 abril de 2009