TREINTA Y CINCO AÑOS, UN MONTON
Por Eduardo Martín Romero
El inicio de la democracia,
hace ya 35 años, marco en la sociedad una explosión por la participación en la
construcción de metas sociales; todo comenzó en las cuestiones preelectorales y
luego se trasladó a los medios de comunicación donde la participación tomo
ribetes populares con un notable incremento numérico de propuestas.-
Es en esta etapa que
algunos comenzamos a incursionar en la radio –entonces solo AM- y en el caso de
Juan Ramón Ridruejo junto a un equipo que venía incursionando en la radio donde
se destaca Loli Homar y el “Flaco” Báez generan un semanario en nuestra ciudad
al que denominaron “El Paceño” desafío que asumieron quizás envalentonados por
esa impronta participativa de la vuelta democrática más que por aspiraciones
económicas.-
Cuando no existían radios
existían periódicos de pocas páginas que cumplían con el objetivo de acercar
información a un grupo minoritario y a excepción de alguno en su mayoría
respondían a partidos políticos.-
La ciudad de La Paz,
comparativamente con el número de su población siempre tuvo un bajo porcentaje
de lectores por lo cual siempre fue difícil el financiamiento de este tipo de
propuestas gráficas y prueba de ello es que muchos periódicos y revistas
semanales dejaron de editarse luego de algún tiempo.-
Juan Ramón Ridruejo
continuó hasta en soledad con la puesta en la calle de las ediciones de su
semanario que edita, lleva a imprimir, vende, busca aportes publicitarios,
realiza entrevista, hace de fotógrafo, todo lo cual es una tarea difícil de
comprender para quienes no están en la gráfica y en una ciudad como la
nuestra.-
Mantenerse durante estos
largos 35 años a fuerza de trabajo a veces solitario, y hacerlo en un país con
más de una etapa de crisis, con hiperinflación, con corralitos y corralones,
con trueque, y con momentos políticos que mueven a la censura e incluso el
sistema perverso impone una autocensura muy notoria es más que una actitud para
festejar y también para felicitar a su mentor.-
En mi caso personal deje
de hacer radio en el año 2012 y en una charla informal le propuse a Juan Ramón,
publicar algunas columnas periodísticas que tenía escritas y desde entonces
durante seis largos años he acompañado con mi propuesta las ediciones de “El
Paceño” y nunca se me puso barrera alguna para que yo expresara mis
pensamientos con la más absolutas de las libertades, es más aún, pienso que
muchas de mis columnas no representan el pensamiento de Juan Ramón y sin
embargo siempre me alentó a continuar en este aporte que realmente me causa
muchísima satisfacción.-
Estoy convencido que por
más que algunos pretendan otro estilo de semanario “El Paceño” es lo que La Paz
tiene desde hace 35 años y el esfuerzo sin duda alguna es solo de Juan Ramón
Ridruejo y lo es con la impronta personal del mismo por eso me parece que la
ciudad de La Paz debe agradecer el trabajo esforzado que en todas y cada una de
las semanas le pone Ridruejo a la concreción de su semanario para que todas las
semanas una nueva edición del mismo esté al alcance de nuestra ciudad.-
Tenemos por costumbre
agradecer las personas y cosas una vez desaparecidas pienso que esta es una de
las oportunidades en que el esfuerzo debe ser premiado por haberse mantenido
durante tanto tiempo.-
Haciendo futurología
vendrá tiempos en que mucha de la historia de los hechos acaecidos en estos 35
años serán recordados por su tratamiento en las páginas de este semanario lo
cual no es poco.-
Alguno podrá suponer que
este agradecimiento es debido a que participo en el semanario con una columna;
quiero en honor a la verdad indicar que cuando hacia radio siempre recordaba
los aniversarios de este Semanario a pesar de no escribir en el mismo y siempre
he valorado lo titánico de la tarea de Ridruejo para esta concreción.-
De esta manera me sumo a
la propuesta de recordar, festejar y reconocer lo significativo y titánico de
la tarea de Ridruejo para mantener vigente “El Paceño” durante estos 35 años y
vamos por muchos más.-
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