ADIOS A LAS BANDERAS, BIENVENIDOS LOS SAPOS
Por Eduardo Martín Romero
A raíz del ajustado
triunfo en el balotaje de la ciudad de Buenos Aires, Macri tomó nota que no
alcanza con los votos del anti Kirchnerismo, que hace falta convencer a
sectores independientes que observan algunas medidas de este gobierno como
benévolas y pretenden el cambio de otras; el afán de conseguir estos votos, que
estiman necesarios algunos cambios pero que no son anti kirchnerista, lo llevo
a Macri a cambiar su discurso señalando la aceptación a la AUH; mantener estatizada
YPF e indicar que mantendrá el sistema jubilatorio y lo que es más aun lo llevó
a expresar su conformidad con Aerolíneas Argentinas, esta última manifestación
justo en una semana de profundos conflictos en la programación de vuelos de
esta compañía.-
No formo parte de los que
entienden que el Estado no debe tener ninguna empresa o que estas deben estar
en manos de capitales privados; pero la mayoría de los seguidores de Macri,
incluido él, siempre han dado muestra que este es su pensamiento y defienden
que el Estado se desprenda de todas las empresas incluidas las de los servicios
públicos.-
Sin dudas es de suponer
que muchos de los seguidores de Macri verán desaparecer una de las banderas más
caras a sus principios lo cual sin dudas dolerá a muchos y aceptaran “tragarse
el sapo” pensando que esta declaración es solo a los fines de obtener confianza
en sectores independientes y de esta manera lograr los votos necesarios para
alcanzar el poder.-
Pero en estos tiempos la
mayoría de los sectores políticos han tenido vivencias de actitudes muy
similares al cambio de discurso de Macri.-
Siempre los políticos, nos
gusten o no, han tenido en las elecciones o durante el poder actitudes que dan
por tierra con muchas banderas de sus seguidores.-
Frondizi asumió la
presidencia en 1958 con el voto del peronismo por entonces proscripto en un
acto absolutamente antidemocrático del gobierno militar; en 1961 Frondizi anula
la ilegalidad del peronismo y este resulta triunfante en las elecciones a
gobernador, Frondizi que resistió 26 asonadas militares y seis intentos de
golpes de Estado es exigido por los militares para anular las elecciones y este
interviene ocho provincias lo que no impide el golpe de estado que lo derroca;
para muchos seguidores de Frondizi fue arriar las banderas y “tragarse el sapo”
sin ningún resultado positivo.-
Alfonsín enfrento el
levantamiento militar de semana santa en la pascua de 1987 en contra de las
acciones judiciales iniciadas contra los responsables de delitos y violaciones
a los derechos humanos, los principales partidos se sumaron en defensa de la
democracia firmando el acta de compromiso democrático pidiendo en la plaza de
mayo por la rendición de los sublevados sin embargo Alfonsín dialogo con los
sublevados y en la plaza anuncio “la casa está en orden” lo que determino que
muchos seguidores interpretaran arriar banderas y “tragar un sapo” por la
pacificación; a pesar de ello hubo tres alzamientos mas, el ultimo a la gestión
de Menem.-
Los Kirchner por
establecer una línea paralela entre Néstor y Cristina también arriaron sus
banderas Néstor amigo de muchos empresarios entre ellos el Grupo Clarín termino
cambiando el discurso y enfrentándose y Cristina cuando expropio YPF manifestó
que no iba a abonar suma alguna sin embargo se arriaron banderas pagando más de
lo pensado además se señalaba que tampoco se abonaría a los acreedores externo
y se termino arreglando con el Club de Paris y en ambos casos la justificación
para “tragar el sapo” fue que era necesario para obtener crédito internacional
lo cual no fue posible hasta hoy por mantener pendiente los fondos buitres.-
El gobierno de los
Kirchner está fuertemente sostenido por el compromiso con los derechos humanos
y las madres de plaza de Mayo es uno de sus pilares; sabido es que la
desaparición de fondos de la fundación de Madres de Plaza de Mayo salpica
fuertemente la credibilidad de estas propuestas de izquierdas lo que dejaron en
muchos militantes la idea de arriar nuevamente banderas tragándose el sapo para
preservar la figura de Hebe de Bonafini; pero también sintieron lo mismo cuando
el gobierno defendía a Milani como titular del Ejercito para “tragarse el sapo”
con la excusa de preservar el poder de Cristina.-
Podríamos abordar un sin
número de situaciones que ejemplifican esta circunstancia de arriar banderas ocurridas
en el devenir histórico de nuestro país que siempre se negociaron con el poder
pero que siempre obligaron a que los militantes deban “tragarse muchos sapos”
con matices de grandes amarguras lo que desanima y resta el esfuerzo colectivo
necesario para que el poder cuente con el genuino apoyo popular mas allá de las
convicciones personales en algunos supuestos enfrentadas.-
Todas estas cuestiones
desorientan cuando menos a los votantes y en algunos supuestos de mayor
significación desaniman con relación al sistema democrático por lo cual es muy
temerario tener, desde el poder, actitudes que obliguen a arriar banderas sin
lograr el convencimiento de su necesidad y dejando el sabor amargo de tener que
“tragarse un sapo”.-
Estos tiempos electorales
no escapan a este marco: vemos radicales sumados a propuestas de derecha;
peronistas enfrentados entre sí, sindicalistas que favorecen propuestas que no
le son propias; acuerdos provinciales o municipales a contramano de los
acuerdos nacionales; todos “sapos” difíciles de digerir.-
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